![](https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEhpZ6qfROTX5d-rG2WaNAJuTZ2laIyBZzkj8W6baWIUMAyt8601_WbgfBslyfDVaKne9oNIUz9r2Txf-H_jg-KL9V4ztqV4MklBtx84QViIdHG_97usMjTC6BGwxU0wGR5hn8VO7yymqIug/s400/EXPOSICI%C3%93N+Y+NOVENA+.jpg)
DIA PRIMERO
Considera Alma mía, cómo la devoción al Señor de los Milagros, ha sido siempre entre nosotros, y sigue siendo todavía, un medio de que se vale este Divino Señor para conceder especiales favores y gracias a los individuos, a las familias, y aún a todo el pueblo. De las almas que acuden con fe y devoción a este Señor de los Milagros, podemos decir espiritualmente y en verdad, que los ciegos ven, los sordos oyen, los enfermos sanan, los muertos resucitan, y quienes se iban a perder, se salvan.
¿Y quién podrá decir los secretos milagros que hace este mismo Señor en favor de las familias que tienen la suerte de contar en su seno con alguna persona devota que a El acude con fe y confianza? La ciudad misma, tan expuesta a temblores de tierra, tal vez se hubiera arruinado mil veces y hubiéramos sido sepultados todos entre ruinas y escombros, si no fuera por la gran devoción a este Señor de los Milagros. ¿Y no es un verdadero milagro el que después de haber pecado no hayamos perecido para siempre y sin remedio? Sí, Dios mío, grande milagro de vuestra misericordia es el mantenernos vivos, capaces de salvación y penitencia cuando hoy más que nunca, merecemos vuestra justa indignación. Haced Redentor amabilísimo, que me aproveche de esta vuestra misericorida y me salve para siempre. Amén.
No hay comentarios:
Publicar un comentario